Financiación para Startups: Más Allá del Equity
Lo que todos buscan, escalar compañías sin diluirse.
En el mundo estartapero el santo grial está en construir un producto escalable y financiar su crecimiento preservando la independencia y la salud financiera del proyecto. Y el capital, que es inteligente, ha diseñado distintas estructuras para combinar el upside del equity sin renunciar a los flujos previsibles de la deuda.
En este post voy a intentar explicar de forma clara y concisa que tenéis para lograr este santo grial.
Hola, soy Jacinto Castillo.
Esto es Prestar y Pedir Prestado una publicación sobre financiación empresarial y de real estate.
Foto de Pavel Moiseev en Unsplash
La Alquimia del Venture Debt
El venture debt representa ese punto intermedio fascinante entre el equity puro y la deuda bancaria tradicional. Permite obtener capital sin diluir participación inmediata, pero conlleva un precio: intereses significativamente superiores al mercado (entre 8% y 12%) y la concesión de derechos económicos futuros al financiador.
Estos derechos suelen materializarse mediante warrants (opciones sobre acciones) o success fees vinculados a eventos de liquidez. La gran ventaja: proporciona oxígeno financiero sin necesidad de precipitar nuevas rondas, extendiendo el runway de la compañía.
En teoría suena fenomenal.
Ahora vamos a la práctica. Yo llevo 25 años financiando y refinanciando empresas y me he leido miles de contratos de financiacion, bilaterales, sindicados, doble Lux-Co, acuerdos marcos, etc….Pues cuando ví el primer contrato de venture debt, tuve que sacarlo a papel, coger rotu rojo y fluorescentes amarillos y rosa….y me tiré un buen raton…la palable que lo define es “imponente”
Por tanto, primer aviso, o te gastas una pasta en asesores legales que te defiendan bien el contrato o en caso de disputa o estas muerto.
Pero esto no acaba aquí.
Lógicamente la redacción de estos contratos y el análisis de la operación tiene un coste para el prestatario. ¿qué es lo más fácil?
Que el prestamista le encargue a un despacho una due diligence bastante profunda y que la pague el prestatario.
Por tanto, aquí vas a sufrir contestando due diligence, pagando asesores legales para firmar un contrato de financiación complicado y pagando altas tasas de tipo de interés.
Ahora te toca a ti valorar si es más eficiente que levantar capital.
Revenue-Based Financing: Crecer a Ritmo de Tus Ingresos
El RBF ha ganado popularidad en negocios digitales con flujos de caja previsibles, y no es casualidad. Su mecánica es molona: el inversor adelanta capital y recupera un múltiplo acordado (típicamente 1.5x o 2x) mediante un porcentaje de los ingresos mensuales.
Lo más sexy para los prestatarios es la flexibilidad: no hay amortizaciones fijas ni vencimientos rígidos. Si vendes más, devuelves más rápido; si atraviesas un bache, el pago se ajusta orgánicamente. No exige garantías físicas ni diluye tu participación, aunque puede resultar costoso si tu crecimiento se dispara exponencialmente. Esta modalidad brilla especialmente en modelos SaaS con bajo churn y márgenes brutos elevados—exactamente donde el valor del dinero en el tiempo se maximiza.
El prestamista se conecta a tu shopify o similar y vas pagando con tus ventas. Aquí ganas algunos meses de runway pero te aconsejo que antes de contratar hagas un sencillo excel: en columnas metes los meses y en filas lo que te prestan y lo que devuelves y calculas la TIR del prestamista.
Te va a sorprender.
Banca tradicional: Escasa sofisticación.
Ya algunos bancos están intentando entender el ecosistema startup. Son apuestas tímidas, pero alguno si tiene cierto interés. Como todo en la vida, la banca depende de personas y algunas que se toman más interés en sus clientes y necesidades que otras.
Por tanto, depende de la persona que hables en cada banco. Mi consejo es que busques en LinkedIn aquellos perfiles -que ya los hay- que están especializados en el nicho estartapero.
Pero aparte de esto, la banca siempre va a querer garantías y es aquí dónde debes contemplar hasta dónde puedes llegar.
Desde los típicos avales de los accionistas, en los que a veces se puede conseguir que este aval sea mancomunado (o sea proporcional a su participación en la compañía), pignoraciones parciales de efectivo para mitigar el riesgo de impago y cesión de derechos sobre facturas de clientes sobre ciertos clientes. Más allá de esto, no hay mucho más…
Por tanto, en esas negociaciones preliminares tienes que abrir la mente, empatizar con el empleado bancario e intentar ver donde puede haber puntos en común.
Es difícil pero no imposible.
El Factor Tiempo: Tu Mejor Aliado o Tu Peor Enemigo
Ten paciencia.
Ninguna de estas estructuras se materializa instantáneamente. Un proceso de venture debt puede extenderse entre 6 y 10 semanas, dependiendo de la preparación del equipo y la claridad de la información financiera. Los bancos no suelen responder en menos de un mes…(si lo hacen antes es para decirte que NO).
Por ello, el momento óptimo para iniciar estos procesos no es cuando la caja está a semanas del colapso, sino cuando acabas de levantar una ronda. Planificar con antelación no solo te permite negociar desde una posición de fortaleza, sino que evita decisiones precipitadas que suelen traducirse en condiciones desfavorables.
No se te ocurra pedir financiación cuando estás sin caja. La pides cuando tienes la caja hasta arriba.
El Dinero No Arregla Modelos Rotos
Una advertencia esencial: muchas startups confunden la financiación con una solución a problemas estructurales de negocio. Esta es una ilusión peligrosa. El capital debe servir para amplificar lo que ya funciona, no para sostener artificialmente lo que no escala.
No te engañes.
Si tu producto no retiene clientes, si tu crecimiento depende exclusivamente de fundir pasta en marketing o si el equipo fundador no comparte visión, cualquier estructura financiera será solo un parche temporal. Antes de comprometer el futuro de la empresa con obligaciones (si, un préstamo es una obligación), asegúrate de que el problema que resuelves es un problema de ritmo de crecimiento, no de fundamentales del modelo.
No es baladí. Gran parte de los fundadores lo suelen confundir.
Consejos Prácticos para navegantes
Para los CEOs en busca de tips concretos sobre financiación, dejo cinco:
Evalúa tu capacidad real de repago antes de asumir cualquier deuda. Sin visibilidad razonable sobre el flujo de caja futuro, mejor explorar otras alternativas. No te obligues si no estás seguro que lo puedes pagar.
Prepara tu información financiera con rigor institucional, incluso si no estás en proceso de captación. Aquí ya empiezas demostrando si eres solvente o insolvente.
Si contemplas financiación bancaria, habla el idioma de los bancos, no los del ecosistema. Te vas a encontrar muuchos interlocutores que no saben-ni quieren saber- que es el churn, MRR, ARR, LtV….clase A, pre seed, etc….
No subestimes el coste operativo y legal de estructuras sofisticadas y molonas. A veces, una ronda adicional de equity, aunque más dilutiva, puede resultar más eficiente en términos globales. Siempre haz los numeros comparativos.
Diferencia entre velocidad estratégica y urgencia financiera. Actuar con agilidad es virtud; operar bajo presión financiera extrema es desventaja .
Conclusión
En un ecosistema donde nueve de cada diez startups fracasan, tienes que valorar todas las opciones, pero si no es posible, no es posible.
Todo el mundo quiere financiarse manteniendo el control pero no es siempre posible. Si llegas a un punto en el cual ni consigues levantar más equity o más deuda, tienes que parar y repensarlo todo. También échale una buena pensada si sólo eres capaz de sólo levantar deuda, pero de forma muy compleja y que no te va a dejar dormir por las noches.
Dejo abierto los comentarios. Te leo.
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