LAS POLÍTICAS DE RIESGO DE CRÉDITO
Las reglas que tiene un banco para prestar.
Las Políticas son las normas por las que se rigen los bancos para:
Prestar
Refinanciar
Clasificar las operaciones concedidas en función del riesgo que esa operación no se pague.
Lo es todo en el banco.
Y lo es todo, porque lo marca el propio banco siguiendo la regulación que se marca desde Frankfurt por parte del ECB.
Y es de obligado cumplimiento.
Aquí no hay grises.
Pero atiende, en el caso de empresas hay 2 máximas:
Te van a evaluar la capacidad de generar caja para atender la deuda. Pero OJO, no sólo la pasada, si no la presente o la futura. Esto significa que puedes tener un histórico intachable, pero como en los provisionales del año en curso demuestres incertidumbre estas “herido”…pero si además no aportas proyecciones CREIBLES de los próximos años estás “muerto”.
Las garantías son necesarias para complementar lo anterior pero por sí solas no son suficientes para la concesión de operaciones.
Bien.
Esto significa que
Puedes tener una generación de caja estupenda que paga de sobra el préstamo, pero como tu empresa no tenga solvencia fincable y/o una buena autonomía financiera y/o garantías adicionales no te van a prestar un euro.
¿Solvencia fincable? Si, que tengas ladrillo dónde el banco pueda colocar un embargo en el caso de que no pagues, aunque luego en la práctica no sepan cobrarse (eso lo explicaré en otro post).
¿Autonomía financiera? Si, que tu ratio fondos propios / total pasivo y deuda / fondos propios sean correctos, como en el punto anterior, eso lo veremos en otros post más adelante.
¿Garantías adicionales? Si, el más habitual es que los accionistas apoyen los riesgos de la compañía mediante su afianzamiento personal.
Foto de Aleksandr Barsukov en Unsplash
Eso es en el caso de nueva financiación o renovación de operaciones ya concedidas.
¿Pero si no puedes pagar lo que tienes?
Es lo que se viene llamando una refinanciación.
O como lo llamamos en el mundillo, una “refi”
Pues aquí lo importante es JUSTIFICAR que con el nuevo planteamiento el banco cobra.
No hay más.
Y aquí sólo hay 2 vías: O dar plazo o hacer una “quita”.
Y la palabra “quita” en banca es como nombrar al diablo.
Y eso sólo se suele admitir en un juzgado, por lo que mejor no seguir hablando de este tema.
En el período 2008 / 2013 los bancos y los asesores financieros éramos muy listos.
Le dábamos a la deuda una patada adelante porque pensábamos que no hay mal que 100 años dure.
No duró 100 años, pero si el tiempo suficiente para tener que poner en marcha el Sareb y se capitalizaran varias cajas de ahorro.
Y eso provocó que los bancos estuvieran muchos años sin prestar un euro, no sólo a empresas y promotores inmobiliarios, sino incluso a particulares.